Houston Dynamo encuentra soluciones en la defensa y vence 2-0 a Minnesota
(image via Aldo Canale)
El Houston Dynamo volvió a sonreír en el Shell Energy Stadium. Luego de la dura derrota sufrida ante Seattle, el equipo dirigido por Ben Olsen se recuperó con una sólida victoria por 2-0 ante Minnesota United, en una noche que tuvo como protagonistas inesperados a dos defensores sudamericanos: Pablo Ortiz y Felipe Andrade, quienes hicieron su primera titularidad en la MLS y anotaron sus primeros goles en la liga.
Ortiz abrió el marcador al cierre del primer tiempo, aprovechando una segunda jugada tras un tiro de esquina que la defensa rival no logró despejar. El colombiano leyó bien la jugada, ganó de cabeza y colocó el balón por encima del defensor en el primer palo. Fue un gol oportuno, justo antes del descanso, que le dio aire a un equipo que había tenido pocas oportunidades claras hasta ese momento.
El segundo tanto llegó en el minuto 77, tras una jugada trabada dentro del área. Luego de una sucesión de rebotes, Andrade peleó con fuerza por la pelota, se sacó de encima a un defensor y, tras ver su primer disparo bloqueado, insistió con un segundo remate que finalmente venció al arquero. Un gol que mostró carácter y convicción, dos cualidades que el Dynamo necesita consolidar para salir de la irregularidad.
Con esta victoria, Houston alcanzó los 13 puntos en 13 partidos, subiendo al puesto 12 de la Conferencia Oeste y quedando a solo tres puntos de la zona de playoffs. El equipo ha mostrado una marcada alternancia en sus últimos cinco partidos —victoria, derrota, victoria, derrota, victoria— y necesita encadenar una racha positiva para afirmarse en la tabla.
Más allá del resultado y del equipo alternativo que presentó Minnesota, el equipo dejó buenas sensaciones. Se mostró ordenado, sólido en defensa y con buena energía en el mediocampo. Jonathan Bond apenas fue exigido y sumó su segunda valla invicta de la temporada, respaldado por una línea defensiva que respondió bien a los cambios. Olsen rotó varias piezas respecto al once habitual y el equipo le respondió, algo que será clave en una temporada larga y exigente.
“Fue una buena victoria con una formación distinta. Los muchachos siguieron el plan de juego, crearon muchas oportunidades y fueron fuertes en defensa”, comentó Olsen tras el partido. “Felipe y Pablo tuvieron buenos partidos. Me alegra que hayan podido marcar. Eso habla del trabajo que se está haciendo en todo el grupo”.
El próximo desafío será este sábado 17 de mayo, cuando el Dynamo visite al FC Dallas en una nueva edición del Texas Derby. Más allá del peso del clásico, el encuentro representa una oportunidad ideal para que Houston confirme la mejoría, abandone la montaña rusa de resultados y se meta definitivamente en la conversación por los playoffs.